La Historia verdadera
de la Conquista de la Nueva España ha
sido por siglos una obra de gran popularidad. Junto con las Cartas de relación de Hernán Cortés, es
de los mejores testimonios de la Conquista. Bernal Díaz de Castillo, vecino y
regidor de la ciudad de Santiago de Guatemala, uno de los primeros
descubridores y conquistadores de la Nueva España y sus provincias. Su crónica
es interesante debido a que relata de una forma desordenada pero coherente y
abordando los temas principales de la conquista.
El autor describe un sin número de datos, nombres
y lugares. Siendo esto interesante debido a que la mayoría de sus datos son
memorísticos, principalmente vivencias del autor por participar en el proceso y
narrar hechos de 1517 en su crónica concluida en 1575. Sin embargo, al
confrontar sus datos con otras crónicas de la conquista de la Nueva España,
realmente es una fuente con veracidad, por supuesto siempre comprendiendo su
posición socioeconómica y sus motivaciones personales.
Además Bernal Díaz del Castillo, dentro de su
obra es duro en contra de ciertos cronistas de la época que escribieron sobre
dicha conquista y que por no estar presentes dieron datos inexactos y narraron
hechos de forma errónea según Bernal. Escribió su Historia verdadera de la conquista de la Nueva España principalmente por dos razones: la primera fue para
desmentir a un historiador llamado Francisco López de Gómara, que había escrito
una historia en la que negaba los méritos de los soldados y se los atribuía a
Cortés y a las potencias celestiales. La segunda era su derrota personal y la
de los soldados, la de los conquistadores ante los burócratas de la Corona.
Es una obra de estilo cautivador desde las
primeras líneas. Nos narra el proceso de la conquista de México de una manera
ruda, aunque sencilla, ágil y directa. Cada página es un retrato pintoresco
plagado de detalles. Leer algunos capítulos es transportarse al pasado y vivir
al lado de un soldado todos los sucesos de la conquista: descripciones de
lugares, relatos de personajes, anécdotas, críticas agudas y angustiantes
relaciones de fatiga y peligros enfrentados.
[…]Así
estaban en esta gran plaza, los que vendían mantas de henequén y sogas y
cotaras, que son los zapatos que calzan y hacen del mismo árbol, y raíces muy
dulces cocidas, y otras rebusterías, que sacan del mismo árbol, todo estaba en
una parte de la plaza; y cueros de tigres, de leones y de nutrias, y de adives
y venados y de otras alimañas y tejones y gatos monteses, de ellos adobados y
otros sin adobar, estaban en otra parte, y otros géneros de cosas y
mercaderías.
Pasemos adelante y
digamos de los que vendía frijoles y chía y otras legumbres y hierbas a otra
parte. Vamos a los que vendían gallinas, gallos de papada, conejos, liebres,
venados y anadones, perrillos y otras cosas de ese arte a su parte de la plaza. […]
El
fragmento anterior describe la plaza de la Nueva España, podría decirse que es
una figura retórica al describir detalladamente la vendimia de los mercaderes.
Bernal enumera cada elemento para mencionarlos de una manera fresca, animada y
riquísima, llena de gracia y vivacidad. También se encuentra en dicha
descripción la naturaleza, tomando como ejemplo a los animales, plantas,
legumbres y demás.
El fragmento involucra la necesidad de los
mercaderes de la Nueva España, pues el haberse topado con la plaza fue un
auténtico descubrimiento, razón por la que impresiona el afán de Bernal para
hacer saber las costumbres de la vendimia que se veía en la plaza.
Bernal plasma en su crónica una historia con
matices que entre líneas muestra la vida de los pueblos que habitaban México
antes de la conquista y todo un cúmulo de hechos que permiten ensamblar parte
de la conquista de la Nueva España. Además, el lenguaje coloquial que usó
Bernal enriquece cada uno de los capítulos, con los sobrenombres, las
emociones, los estados de ánimo, cada una de las historias y viajes que hacían
tanto los dioses, indígenas y los emperadores. Por otro lado habla de retórica
y estilo, de pequeñas historias y saca a colación sus conocimientos sobre
versos y romances y sus formas coloquiales.